Trump bloquea todo el petróleo ruso y eleva la presión sobre Putín
22/10/2025Actualizado 23/10/2025 a las 00:39h. Estados Unidos ha dado un gran salto cualitativo en la presión económica sobre Moscú al sancionar de forma directa la columna vertebral de su industria energética, algo que hasta ahora se había resistido a hacer. El Tesoro incluyó este miércoles en la lista negra ... a Rosneft y Lukoil, las dos mayores petroleras de Rusia, junto con decenas de sus filiales. La medida implica el bloqueo automático de sus activos bajo jurisdicción estadounidense y la prohibición de que bancos o empresas de EE.UU. y aliados intermedien en cualquier operación con ellas. Rosneft es la gran petrolera estatal y controla desde la extracción hasta la exportación y el refinado. Lukoil es la principal empresa privada del sector, con operaciones internacionales y un papel clave en la entrada de divisas del Kremlin. Entre ambas sostienen la base fiscal y energética que financia el esfuerzo militar ruso. Donald Trump ha criticado en meses recientes que los socios europeos sigan comprando petróleo a Rusia, y ha advertido de posibles sanciones secundarias. Washington ha querido dejar claro que ya no sanciona solo a figuras políticas o bancos, sino al corazón de la maquinaria económica que sostiene la guerra. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, justificó la decisión con un mensaje político directo: «Ahora es el momento de detener las matanzas y acordar un alto el fuego inmediato. Dado que Putin se niega a poner fin a esta guerra sin sentido, sancionamos a las dos mayores compañías que financian la maquinaria de guerra del Kremlin». Aseguró además que Estados Unidos «está preparado para ir más lejos» e instó a los aliados a «sumarse sin resquicios», para evitar desvíos comerciales a través de terceros países. La dureza del paquete coincidió con uno de los ataques más intensos de Rusia contra Ucrania en semanas. Durante la noche, Moscú lanzó 405 drones y 28 misiles contra al menos diez regiones, con Kiev y Járkov como epicentros. Una vivienda ardió con una madre y sus dos hijas pequeñas dentro; una guardería fue alcanzada mientras había menores en su interior; varios bloques de viviendas registraron incendios tras el impacto de restos de proyectiles interceptados. En las calles de Kiev, bomberos y sanitarios trabajaban entre cascotes mientras los equipos de rescate evacuaban a vecinos envueltos en mantas térmicas, según Reuters. Ucrania lo interpreta como la enésima demostración de que el Kremlin no está dispuesto a aceptar un alto el fuego en los términos planteados por Occidente. En la bilateral con Rutte en el Despacho Oval, Trump dijo que aun ve posibilidades de alcanzar una paz negociada. «Siempre tuve la sensación de que él quería el control total», dijo sobre Putin. «Pero ahora creo que está dispuesto a negociar un poco más, dispuesto a llegar a un acuerdo. Veremos. Lo que no queremos es que se quede con todo.» Estas sanciones llegan en paralelo a un cierre abrupto del canal diplomático que Trump intentó abrir con Putin. El presidente estadounidense había preparado una reunión relámpago en Budapest para tantear una salida política inmediata, pero la congeló al considerar que no habría avances reales: «No quiero una reunión desperdiciada», dijo. Desde el Kremlin niegan que exista cancelación y hablan de «preparación prolongada», un eufemismo habitual cuando Moscú no quiere reconocer un bloqueo pero tampoco ofrece concesiones. Al mismo tiempo, Putin ordenó maniobras de sus fuerzas estratégicas nucleares, un gesto calculado para recordar que la escalada tiene límites y que la última palabra sigue siendo rusa. La OTAN se ha movido para evitar un vacío. Mark Rutte llegó a Washington este mismo miércoles para intentar mantener implicado a Trump en la fase final de la negociación. No llegó con una propuesta nueva, sino con un mensaje político: la Alianza necesita que sea Trump quien rubrique el acuerdo y lo haga suyo. «Es el único que puede lograrlo», dijo. Su visita busca blindar el andamiaje diplomático antes de que se degrade, y evitar que un retroceso en la presión conjunta deje a Ucrania a la intemperie. Noticia Relacionada estandar La presencia de Turquía en la fuerza de paz de Gaza desata tensiones entre Israel y EE.UU. David Alandete En una visita a Jerusalén, el vicepresidente de Trump defiende que se respete el alto el fuego y Netanyahu advierte de que su país actuará por su seguridad Zelenski, por su parte, había estado en la Casa Blanca unos días antes, en la que fue su tercera visita a Trump desde que este regresó al poder. Llegó con mapas, inteligencia militar y una solicitud explícita: misiles Tomahawk para castigar nodos logísticos rusos en profundidad. No los obtuvo. La Casa Blanca dejó en suspenso cualquier escalada armamentística significativa mientras se mantuviera viva la opción de forzar a Putin a una negociación directa. El presidente ucraniano se marchó de Washington sin avances materiales, pero con la confirmación de que su suerte dependerá ya de si Moscú acept
Estados Unidos ha dado un gran salto cualitativo en la presión económica sobre Moscú al sancionar de forma directa la columna vertebral de su industria energética, algo que hasta ahora se había resistido a hacer. El Tesoro incluyó este miércoles en la lista negra ... a Rosneft y Lukoil, las dos mayores petroleras de Rusia, junto con decenas de sus filiales. La medida implica el bloqueo automático de sus activos bajo jurisdicción estadounidense y la prohibición de que bancos o empresas de EE.UU. y aliados intermedien en cualquier operación con ellas.
Rosneft es la gran petrolera estatal y controla desde la extracción hasta la exportación y el refinado. Lukoil es la principal empresa privada del sector, con operaciones internacionales y un papel clave en la entrada de divisas del Kremlin. Entre ambas sostienen la base fiscal y energética que financia el esfuerzo militar ruso. Donald Trump ha criticado en meses recientes que los socios europeos sigan comprando petróleo a Rusia, y ha advertido de posibles sanciones secundarias. Washington ha querido dejar claro que ya no sanciona solo a figuras políticas o bancos, sino al corazón de la maquinaria económica que sostiene la guerra.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, justificó la decisión con un mensaje político directo: «Ahora es el momento de detener las matanzas y acordar un alto el fuego inmediato. Dado que Putin se niega a poner fin a esta guerra sin sentido, sancionamos a las dos mayores compañías que financian la maquinaria de guerra del Kremlin». Aseguró además que Estados Unidos «está preparado para ir más lejos» e instó a los aliados a «sumarse sin resquicios», para evitar desvíos comerciales a través de terceros países.
La dureza del paquete coincidió con uno de los ataques más intensos de Rusia contra Ucrania en semanas. Durante la noche, Moscú lanzó 405 drones y 28 misiles contra al menos diez regiones, con Kiev y Járkov como epicentros. Una vivienda ardió con una madre y sus dos hijas pequeñas dentro; una guardería fue alcanzada mientras había menores en su interior; varios bloques de viviendas registraron incendios tras el impacto de restos de proyectiles interceptados. En las calles de Kiev, bomberos y sanitarios trabajaban entre cascotes mientras los equipos de rescate evacuaban a vecinos envueltos en mantas térmicas, según Reuters.
Ucrania lo interpreta como la enésima demostración de que el Kremlin no está dispuesto a aceptar un alto el fuego en los términos planteados por Occidente.
En la bilateral con Rutte en el Despacho Oval, Trump dijo que aun ve posibilidades de alcanzar una paz negociada. «Siempre tuve la sensación de que él quería el control total», dijo sobre Putin. «Pero ahora creo que está dispuesto a negociar un poco más, dispuesto a llegar a un acuerdo. Veremos. Lo que no queremos es que se quede con todo.»
Estas sanciones llegan en paralelo a un cierre abrupto del canal diplomático que Trump intentó abrir con Putin. El presidente estadounidense había preparado una reunión relámpago en Budapest para tantear una salida política inmediata, pero la congeló al considerar que no habría avances reales: «No quiero una reunión desperdiciada», dijo.
Desde el Kremlin niegan que exista cancelación y hablan de «preparación prolongada», un eufemismo habitual cuando Moscú no quiere reconocer un bloqueo pero tampoco ofrece concesiones. Al mismo tiempo, Putin ordenó maniobras de sus fuerzas estratégicas nucleares, un gesto calculado para recordar que la escalada tiene límites y que la última palabra sigue siendo rusa.
La OTAN se ha movido para evitar un vacío. Mark Rutte llegó a Washington este mismo miércoles para intentar mantener implicado a Trump en la fase final de la negociación. No llegó con una propuesta nueva, sino con un mensaje político: la Alianza necesita que sea Trump quien rubrique el acuerdo y lo haga suyo. «Es el único que puede lograrlo», dijo. Su visita busca blindar el andamiaje diplomático antes de que se degrade, y evitar que un retroceso en la presión conjunta deje a Ucrania a la intemperie.
Noticia Relacionada
estandar La presencia de Turquía en la fuerza de paz de Gaza desata tensiones entre Israel y EE.UU.
David Alandete
En una visita a Jerusalén, el vicepresidente de Trump defiende que se respete el alto el fuego y Netanyahu advierte de que su país actuará por su seguridad
Zelenski, por su parte, había estado en la Casa Blanca unos días antes, en la que fue su tercera visita a Trump desde que este regresó al poder. Llegó con mapas, inteligencia militar y una solicitud explícita: misiles Tomahawk para castigar nodos logísticos rusos en profundidad. No los obtuvo. La Casa Blanca dejó en suspenso cualquier escalada armamentística significativa mientras se mantuviera viva la opción de forzar a Putin a una negociación directa. El presidente ucraniano se marchó de Washington sin avances materiales, pero con la confirmación de que su suerte dependerá ya de si Moscú acepta o no ese alto el fuego propuesto desde la OTAN.
El Congreso también se alineó con este endurecimiento. La Comisión de Exteriores del Senado aprobó tres proyectos de ley destinados a cercar económicamente al Kremlin: designar a Rusia como estado patrocinador del terrorismo por el secuestro de menores ucranianos, destinar activos rusos congelados a la reconstrucción de Ucrania y sancionar a China por su apoyo industrial y financiero a la maquinaria militar rusa. Había una mayoría suficiente para aprobar estas medidas desde hace semanas, pero se habían paralizado para dejar una ventana a la posible cumbre de Trump con Putin.
La estrategia resultante y liderada por Trump es doble: asfixia económica para condicionar a Moscú y diplomacia sujeta a verificación.
Zelenski dijo el miércoles que la propuesta de Trump de congelar la guerra en la línea actual del frente «era un buen compromiso», un primer paso que podría abrir la puerta a una negociación formal mas adelante. Reclamó además que la UE, Estados Unidos y el G7 aumenten la presión conjunta para obligar a Moscú a sentarse a la mesa, y subrayó que esa presión solo puede ejercerse «con sanciones, capacidad de alcance profundo y diplomacia coordinada entre todos los socios», informa AP.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Artículo solo para suscriptores
¿Cuál es tu Reacción?
